La secretaria general de UNESPA ha hecho un llamamiento a la necesidad de reforzar los sistemas de previsión social individual para garantizar un bienestar social y económico llegado el momento de la jubilación.
“Necesitamos de un estímulo fiscal para potenciar el ahorro a largo plazo y, parece, que no vamos en la dirección correcta”, así lo ha remarcado durante su participación en una clase magistral organizada por la Escuela de Negocios de Seguros, CECAS con motivo de la inauguración de una nueva edición del Curso Nivel 1.
Para del Valle, se trata de “una de las asignaturas pendientes de nuestro país y donde el seguro puede contribuir notablemente para que los ciudadanos, en el momento de su jubilación, puedan complementar la pensión pública con determinado ahorro que les permita, de alguna manera, vivir mejor, más teniendo en cuenta que pueden plantearse situaciones sobrevenidas como enfermedades o dependencia que pueden requerir de un mayor uso de recursos”.
Durante su intervención, en la que han participado cerca de 500 alumnos y colegiados, la secretaria general de UNESPA se ha referido a países de nuestro entorno destacando que “todos los países que tienen tasas de ahorro interesantes son países en los que se ha producido una decidida apuesta de los poderes públicos en pro del ahorro-previsión que en España ha faltado”. En los últimos dos años, en nuestro país, se ha reducido de 8.000 a 1.500 euros el límite de las aportaciones a los planes individuales con derecho a desgravación en el IRPF.
Del Valle ha reconocido que hay un compromiso por parte de la administración para el desarrollo de la previsión social en el marco de las empresas (segundo pilar), pero “esto no debería implicar limitar la posibilidad de aportaciones a nivel individual (tercer pilar)”, por lo menos, mientras no se haya desarrollado adecuadamente el segundo pilar.
La secretaria general de UNESPA también ha aprovechado para realizar un análisis de cómo ha sido el proceso de transformación del sector durante los últimos años y cómo la situación actual de incertidumbre -guerra de Rusia en Ucrania, crisis energética, inflación, cambio climático- puede afectar a un sector de “carácter contracíclico”.
Del Valle ha destacado también la importancia de la figura del mediador tanto por su capacidad de asesoramiento y acompañamiento, como por su conocimiento y, capacidad de formación continuada y, especialmente, por su capilaridad y capacidad para llegar a cualquier punto de la geografía española.